Milwaukee Bucks: Un inicio de temporada complicado

11 noviembre 2024

Los Milwaukee Bucks han comenzado como una de las sorpresas negativas de la liga. Pese a la expectativa generada en torno al equipo, que cuenta con dos de las figuras más destacadas del baloncesto actual, Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard, los resultados han sido decepcionantes. Con un balance de dos victorias y ocho derrotas en sus primeros diez juegos, ocupan la penúltima posición en la Conferencia Este, un inicio muy por debajo de lo que se esperaba para un equipo de su calibre.

Uno de los principales factores que ha influido en el mal arranque de los Bucks ha sido la ausencia de Khris Middleton, pieza clave en la rotación y en la estrategia del entrenador Doc Rivers. La falta de Middleton, quien aporta tanto en la defensa como en la ofensiva, ha obligado a Rivers a experimentar con diferentes alineaciones y rotaciones que aún no encuentran el equilibrio ideal. Según el propio Rivers, los quintetos pequeños que diseñó para aprovechar la versatilidad de Middleton han tenido dificultades sin él en la cancha. El técnico reconoció en una rueda de prensa reciente que la falta de cohesión en la rotación está afectando al equipo, pero mantiene la confianza de que los Bucks están en los playoffs cuando recuperen a su estrella. A nivel defensivo, los Bucks también han enfrentado problemas importantes. Su defensa ha permitido 116,3 puntos por cada 100 posesiones, colocándolos entre los equipos menos eficientes en este aspecto. En palabras de Rivers, el equipo necesita mejorar su disciplina y fortalecer su comunicación en la cancha para evitar que los oponentes exploten las debilidades defensivas de Milwaukee.

El traspaso de Damian Lillard a Milwaukee fue visto como un movimiento estratégico que ayudaría a aliviar la carga ofensiva de Antetokounmpo. Sin embargo, la pareja no ha demostrado la química que se esperaba, con un impacto negativo en los 123 minutos que han compartido en la cancha. Este inicio deficiente en su rendimiento colectivo genera dudas sobre si Lillard y Antetokounmpo podrán llevar al equipo a competir por el campeonato. “Dame-time”, ha experimentado una notable caída en su rendimiento individual, con un pobre porcentaje de aciertos en tiros exteriores. Su precisión desde la línea de tres puntos ha bajado al 26,7%, muy lejos de su promedio de carrera del 37,2% cuando jugaba en los Blazers. Este descenso en su eficacia afecta no solo a su rol como anotador, sino también a la dinámica del equipo, que esperaba un mayor impacto de su presencia en términos de dirección y organización ofensiva. La adaptación de Lillard al sistema de los Bucks y a la presencia dominante de Antetokounmpo parece estar en construcción, lo cual ha sido un proceso más complejo de lo previsto.

Por otro lado, Antetokounmpo, la cara de la franquicia y una de las figuras más dominantes en la NBA, también ha compartido el optimismo de Rivers. Aunque reconoce que las derrotas son frustrantes, Giannis asegura que no piensa rendirse, y recuerda las enseñanzas de su padre sobre la importancia de perseverar. Según el jugador, la disciplina y la determinación serán las claves para superar este difícil momento. Estas palabras no solo son un mensaje de esperanza para los aficionados, sino también una señal de su compromiso con el equipo y de su disposición a enfrentar los desafíos de la temporada.

Históricamente, el inicio de temporada con un balance de 1-6 ha sido un augurio sombrío para la mayoría de los equipos. De hecho, solo 12 de los 150 equipos que han comenzado con este récord desde 1970 lograron llegar a los playoffs, y sólo cinco lo hicieron con un récord negativo. Sin embargo, tanto Rivers como los jugadores de los Bucks insisten en que tienen las herramientas necesarias para revertir la situación. El calendario que se avecina no será fácil: Milwaukee se enfrentará a equipos complicados como los Knicks y los Celtics, rivales que pondrán a prueba su capacidad de respuesta. A medida que la temporada avanza, los Bucks se enfrentan a un camino cuesta arriba. Si logran mejorar su rendimiento defensivo, encontrar la alineación ideal y fortalecer la conexión entre Antetokounmpo y Lillard, aún podrían convertirse en contendientes en el Este.